
Lo que más fascina de la Virgen María es su amor por Cristo, un amor de madre ya que además de haberlo llevado en su vientre, lo fue acompañando a lo largo de su paso por nuestro mundo. Dicha mujer, que ha sido capaz de fascinar a creyentes de todos los tiempos, busca dejarnos un mensaje de amor para darnos su consuelo maternal e impulsarnos a trabajar por un mundo mejor donde la paz sustituya a la violencia.