Creadores de futuro...
Estamos iniciando un nuevo ciclo lectivo y, con él, se nos presentan numerosos desafíos que renuevan nuestra vocación docente.
Desde la nueva cultura del aprendizaje, el conocimiento se caracteriza por ser inabarcable y estar en continua transformación. Esto nos ubica en una sociedad de aprendizaje continuo y generalizado, definida por la necesidad de "aprender a aprender" y de adquirir capacidades y competencias.
debido a esto, nuestro papel y nuestra formación están cambiando en la medida en que hemos pasado de un sistema de enseñanza dirigida a guiar a transmitir información y contenidos a una enseñanza dirigida a guiar y andamiar el proceso de adquisición de capacidades, competencias y significados en nuestros alumnos y alumnas.
En definitiva, hoy debemos preparar a los niños y a las niñas para que puedan insertarse en los mundos "por venir" y que también sean capaces de construirlos y transformarlos; aunque esos mundos "por venir" no nos ofrezcan certezas.
Desde los nuevos diseños curriculares nos proponen "asumir que el futuro no está determinado de forma absoluta, sino que se construye, se inventa". Si se considera que el presente se explica por las decisiones que se tomaron en el pasado, entonces, lo que suceda en el futuro depende de las decisiones que hoy estamos tomando, No existe un futuro -único y predeterminado-, sino un abanico de posibilidades. Estos "futuros posibles" se encuentran en germen -como indicios- en el presente, en mayor o menor medida. La concrreción de un camino u otro depende entonces de las decisiones y de las acciones humanas que clausuran, potencian o desarrollan esas posibilidades.Este enfoque nos permite recuperar la esperanza, pero también el poder y la voluntad: el futuro, como espacio de libertad, depende de las voluntades de los sujetos, quienes -con mayor o menor margen de incidencia y legitimidad- en este proceso se asume como actores políticos activos"
Es por esto que los maestros y las maestras argentinas somos creadores de futuros, lo que implica brindarles a nuestros alumnos y alumnas la preparación necesaria para que ellos puedan elegir, entre los muchos futuros posibles, aquel que deseen. y parados desde ese lugar, generar sus proyectos personales y sociales desde el presente, a partir de vivir, en las instituciones educativas condiciones fecundas para su gestión.